Las mujeres que se involucraron en el proyecto fueron capacitadas en reciclaje artesanal por técnicos de la División de Educación Ambiental de la Itaipu Binacional, a través de varios programas de acción.

Fidel García, técnico de la División de Educación Ambiental de la Itaipu Binacional, indicó que básicamente para la construcción del parque fue dentro del marco del apoyo que está dando la entidad a la inauguración del local del Centro Regional para Mujeres.

La construcción consistió en una visión ecológica en la que se utilizan materiales reciclados, sobre todo botellas para bancos o asientos y murales, según explicó.

Señaló que la División de Educación Ambiental está realizando un trabajo muy interesante con grupos de mujeres que trabajan en reciclaje y con comunidades indígenas, con un enfoque de salida laboral y la reutilización de desechos que puedan eventualmente venderlos.

Se trabajó con un grupo de mujeres de Minga Guazú que ya tienen experiencia en la construcción de bancos de botella, quienes participaron activamente ya que es un local para proteger los derechos de la mujer, conforme destacó Fidel García.

“Como técnicos de educación ambiental nos damos cuenta que varios de los objetivos trazados para las diferentes acciones se están aplicando a través de estas experiencias, sobre todo para la construcción de conciencia colectiva”.

Señaló que todo esto se logra mediante la sensibilización para de alguna manera llegar a la mentalidad ciudadana de que los desperdicios se pueden reutilizan en una cantidad importante y que también permite una opción laboral para muchas amas de casa y comunidades indígenas.

“Los protagonistas van entendiendo que tenemos que cuidar el medio ambiente donde vivimos y que todos podemos participar en mejorarlo y en ese sentido, las mujeres están liderando un protagonismo importante al participar del establecimiento de la eco plaza en el centro de mujeres que queda como un modelo y referencia de preservación ambiental”, indicó Fidel García.

Agregó que el enfoque es ser abierto a las comunidades, a los barrios más populares y pobres del departamento, para que la gente se sienta partícipe y pueda ser protagonista en la construcción de plazas y otros emprendimientos para que la propia comunidad se sienta cómoda en su ambiente de convivencia.

Mencionó que en la zona hay gran cantidad de material reciclable y que la División de Educación Ambiental de la Itaipu está trabajando con grupos de gancheros, a quienes se les brinda asistencia técnica para la producción de materiales reciclables con aceptación en el mercado.

Malir Cristaldo, instructora de reciclaje artesanal de Itaipu, indicó que el parque fue construido por mujeres artesanas del barrio Padre Damián de Presidente Franco, mujeres indígenas de la comunidad Mbya Guaraní del barrio La Blanca y “Jardín del Oriente de Minga guazú, donde la Itaipu implementó un proyecto de reciclaje e integración a través del cual se construyó el primer modelo de bancos ecológicos.

Para la construcción del parque en el predio del Centro de Mujeres, fueron utilizados 60 neumáticos desechados, distribuidos en cinco juegos, cinco bancos y cinco planteras. También fueron construidos los bancos ecológicos con botellas de plástico que fueron reciclados por las mujeres indígenas. Fueron utilizados unas mil botellas.

Cristaldo, indicó que el trabajo fue posible mediante la voluntad de las mujeres que fueron capacitadas en reciclaje artesanal por la División de Educación Ambiental de la entidad.