El grupo musical “Pynandi” está ultimando detalles para la presentación oficial del grupo y lanzamiento del CD, que contiene temas relacionados con las vivencias de sus integrantes a través del diálogo intercultural con varias etnias indígenas. El evento se realizará el 27 de febrero a partir de las 21:00 hs, en el Teatro Municipal Ignacio A. Pane, Asunción.

Pynandi es un grupo musical étnico, nativo, folclórico, que pretende rescatar la cultura musical tradicional indígena y nace como inspiración de 13 años de experiencia en distintas comunidades autóctonas del país, producto de la sabiduría ancestral transmitida de generación a generación, según lo expresado por la cantautora del grupo, Norma Ávila.

“Buscamos que la letra transmita un py´arory (felicidad, dicha). Ellos son muy sabios, cuando puse mis oídos aprendí mucho. En la cultura indígena hay mucho por rescatar”, acotó la cantautora.

“Pynandi nace como agradecimiento por todo lo que esta sabiduría aportó en mi vida, cambió mi vida. Me siento como un nexo, para que la gente que no se animan a acercarse a ellos, puedan conocerlos, saber cómo piensan, cómo creen en la naturaleza, cómo es nuestra cultura, entonces es generar ese acercamiento que lo hacemos a través de la música”, refirió.

Norma resaltó la importancia de que las personas vean y sientan a los pueblos originarios como parte de sí mismas. “Tenemos que ser concientes de que el 99% del paraguayo tiene sangre nativa”, señaló.

Explicó además, que el paraguayo niega sus orígenes y hasta su propio idioma, por lo que es primordial la aceptación, “los indígenas son parte nuestra”.

La identificación con la naturaleza desde la metáfora del “Pynandi”, propició la construcción espontánea de un escenario para la actuación del grupo y el diálogo periodístico, como una previa de lo que va a ser la presentación del grupo en el Ignacio A. Pane.

Los ejes temáticos de las canciones están vinculados con las vivencias que mantuvo Norma Ávila, en su acercamiento cultural a diversos grupos étnicos indígenas, tanto de la región Oriental como Occidental, como los Aché, Pai Tavyterá, Ava Guarani, Mbya y Enxet.

Sus viajes permitieron un contacto fluido con los sabios o los abuelos, quiénes al sentir confianza por la actitud de respeto demostrada por la visitante, decidieron abrirse y socializar sus conocimientos. “Prácticamente en todas las letras hay palabras de los abuelos. De este modo, nosotros rescatamos las mismas, cuyas significaciones no tienen nada de mala honda y las palabras no dañan. Trabajamos para que la música sea agradable, constructiva y transmita alegría”.

La labor del grupo musical “Pynandi” está relacionada con la preocupación del establecimiento de una especie de didáctica para promover la cultura tradicional indígena en diálogo con formas culturales modernas.

“Ellos me fueron enseñando todo el tiempo. Lo que ahora está saliendo es producto de la preocupación que tenemos por hacer comprensible una cultura como la indígena a un público que tiene prejuicios. Es frecuente escuchar la expresión “ese indio”. Y, ellos al contrario de ese tipo de valoración negativa, son muy sabios. La cuestión es que no se abren a cualquiera, ya que muchas veces dicen que no vale la pena, pues perciben que la gente no les escucha. En mi caso, mis oídos se fueron abriendo a sus expresiones y cada vez más encuentro elementos culturales que deben ser rescatados”, comentó Ávila.

En tono de mucha convicción, con recuerdos y vivencias fuertes, Ávila busca comunicar su relación con los pueblos indígenas. “Yo voy a vivir con ellos dos o tres días. Así sienten confianza. En una ocasión, llegué a las 6 de la mañana en una comunidad Pai Tavyterá y simplemente les saludé, confesándoles que quería conocerles. Ellos valoraron mi actitud de búsqueda de acercamiento a la cultura. Realmente me aportaron muchísimo”.

La música como diálogo cultural

Ávila comentó que su papel es la de ser nexo entre la cultura indígena y la sociedad en general, para que a través de la música exista acercamiento y comprensión sobre la visión de la naturaleza y la cultura.

“Nuestra vivencia de 13 años con los pueblos indígenas, se traduce ahora en un CD, que contiene temas musicales referidos a los mismos. La idea es que la gente asimile a los pueblos indígenas como parte de ella. El 99 % de los paraguayos tenemos sangre nativa. Yo tengo muchísimo y no sé si es Ava, Ache o Mbya Guarani. Pero ya dejé de preocuparte por esto. Ahora soy todas las etnias. Es que a nivel cultural, muchos se niegan a sí mismos y eso es muy grave”, dijo.

“En una ocasión, durante una reunión, una abuela indígena se paró y en medio del grupo manifestó -dirigiéndose a nosotros- que somos como aquellos hijos que rechazan a su madre. Evidentemente se estaba refiriendo a nosotros. Es que en Paraguay hacemos eso. Negamos por ejemplo, nuestro idioma. El guaraní es amplio y maravillo. Pero mucha gente no habla porque tiene vergüenza”, reflexionó Ávila.

Según la cantaautora, “Pynandi” es una inspiración que sale de la selva. “Pynandi somos todos porque la conexión con la tierra se hace a través de los pies descalzos. Así, primero escribo, como producto de mi inspiración, luego se realiza la musicalización”.

Estilo nativo-etno-folklórico

La dinámica de trabajo del grupo musical arranca con las composiciones básicas que Ávila prepara. La estilización con instrumentos musicales de percusión y la guitarra van entremezcladas con estilos nativo-etno-folklóricos.

“Melódicamente hablando, los indígenas siguen la línea pentatónica, que es la forma de cantar de ellos, tanto en Paraguay como en el Altiplano. Nuestro arte también es étnico porque estamos usando un set de percusión, donde la batería utiliza cueros de animales, entre otros. Y, seguimos la línea folclórica, ya que nos valemos del folclore latinoamericano, como el chamamé, samba argentina, polca paraguaya y joropo Venezolano”, explicó Alejo Patricio Jiménez, integrante de Pynandi.

Como músico multifacético, Jiménez recordó que el objetivo del grupo es el rescate de la melodía nativa. “Si uno escucha el sonido que Ávila Propone, el fenómeno te transporta al bosque y los pueblos indígenas. Entonces, con esta mezcla, se busca hacer la fusión de lo tradicional con lo moderno”.

El impacto de la música

El impacto de la música desde el uso estratégico del ritmo sobre la psicología del ser humano, fue también explicado por Jiménez. “El ritmo es lo primero que existió. El mismo te puede llevar para un estado de trance. Una melodía en violín o flauta te puede hacer llorar, pero no te puede hacer entrar necesariamente en trance como sí podría ocurrir con lo rítmico.

Integrantes

El trío musical está compuesto por: Norma Ávila, cantaautora; Leandro Jiménez, instrumentos de percusión; Alejo Jiménez, guitarra.