El proyecto de utilización de plantas macrófitas para el tratamiento y depuración de aguas residuales, que busca implementarse en el Zoológico de Itaipu, fue presentado el lunes 5 de setiembre, por la Universidad Nacional de Asunción y la Empresa Española Macrófitas.

La empresa española Macrófitas, conjuntamente con la Universidad Nacional de Asunción ha presentado a Itaipu, una propuesta basada en la utilización de una tecnología sencilla y práctica, que consigue posicionar las plantas macrófitas flotando sobre las aguas, con ello se logrará absorber la mayor cantidad de contaminantes.

“Hemos visto la experiencia de ellos donde en el agua servida - en su etapa final- no solamente hay peces sino que ellos se animan a tomar el agua que sale de allí. Con este sistema vamos a poder utilizar la tecnología de la naturaleza y garantizar que el agua  utilizada en el Zoológico de Itaipu, las aguas servidas, sean totalmente purificadas para volver a utilizarlas ya sea para los animales, sistema de riego o derivadas al lago Acaray”, expresó Pedro Mancuello, director de Coordinación de la Itaipu.

El proyecto consiste en tres piletas de decantación para tratar 272 mil litros de agua del Zoológico (cantidad que es utilizada actualmente para la limpieza de las jaulas de los animales, etc). Mediante esas piletas y la distribución de las plantas macrófitas en un sistema de redes inventado y patentados por la empresa española, se conseguirá purificar el agua.

El proyecto tiene un costo aproximado de 270 mil dólares e incluye la patente, la transferencia de tecnologías y la reproducción de las plantas faltantes en el vivero de Itaipu.

“La inversión versus la posibilidad de mostrar una nueva tecnología es algo para nosotros muy conveniente. El proyecto podría estar concretado seis meses posteriores a la orden de inicio. Dependemos de la documentación que presente la Universidad Nacional de Asunción sobre la patente y la posterior aprobación del Directorio de Itaipu para la ejecución de los trabajos. Serían como dos meses de proceso administrativo y seis meses de proceso para tenerlo finalizado”, explicó Mancuello.

Mencionó también, que se presentará al Directorio de Itaipu un pedido de dispensa a la Comisión de Licitación y la adjudicación directa a la Universidad Nacional de Asunción con la patente de la empresa española Macrófitas, para el pronto inicio de los trabajos.

“Implementación en proyectos de interés país”

César Cardozo Román, director General de Investigación de la Universidad Nacional de Asunción, sostuvo que la aplicación del sistema de tratamientos de efluentes con biodepuración se pretende implementar en el Paraguay, en proyectos de interés país.

“La tecnología en sí es sumamente interesante por que se ha hecho eficiente el trabajo de una planta que se llama Totora, que es la Typha dominguensis, una especie de reproducción de distribución global que existe en Paraguay. La innovación está en el sistema de flotación para la planta, presentado por la empresa española, con ello se hace mucho más eficiente el trabajo de depuración de las aguas servidas”, señaló Cardozo, quien indicó que actualmente se espera la definición de la Itaipu para el avance del proyecto en el Zoológico.

“Dejamos el agua tan limpia como si fuera de un manantial”

En representación de la empresa española Macrófitas, Vicente Torres Junco, señaló que el proyecto se puso en funcionamiento en el año 1998 y que todo el sistema de plantación sobre el agua se encuentra patentado como Hidrolution FMF (Filtro de plantas Macrofitas en Flotación).

“Con este sistema se puede acometer la limpieza de los lagos, ríos y de las aguas residuales. También estamos aplicando en África donde hay mucha escasez de agua para beber. El Río Níger es prácticamente tan largo como el Río Nilo, pero lleva muchos metales pesados en sus aguas por que pasa por conductores volcánicos. La esperanza de la población de vivir allí es menos de 40 años y cuando hemos implantado este sistema, la mortandad infantil ha bajado más del 75% y además se ha mejorado la situación con la erradicación del cólera”, explicó el especialista.

Añadió además, que ha bebido el agua de los ríos y lagos donde se implementaron el proyecto. “Los microorganismos que dejan estas plantas para nosotros son saludables y además se alimentan de los metales pesados, entonces sabemos que el sistema radicular (conjunto de raíces de estas plantas) está lleno de antibióticos y de otros microorganismos que se dedican a depredar sobre los patógenos”, puntualizó.

De acuerdo al método de implementación del proyecto, Torres señala que se debe contar con una cierta extensión de plantas según la cantidad y el volumen a depurarse. “Si tenemos mucho caudal, tendremos más extensión de plantas. Eso se calcula, tenemos la fórmula matemática para saber cuánto son capaces de oxidar esas plantas y con ese monto dejamos completamente el agua limpia. Es la primera vez que hacemos un procedimiento auto-sostenible del agua, nosotros llegamos a depurar el agua dejándola tan limpia como si fuera de un manantial”, refirió.