La metodología del I Foro Nacional de Comunicación para el Desarrollo, “Ñe’ê Jeroguata” , propició la realización de varios espacios de debates constituidos por las mesas de diálogos. Como parte final del encuentro, el viernes 25 de noviembre, se debatió el tema de “Superación de las desigualdades. La comunicación en el proceso de integración de los pueblos”.

Para el ministro de Comunicación Augusto dos Santos, el Mercosur “es una preciosa experiencia de cómo se puede perder 20 años en materia de comunicación”. La afirmación del ministro se relacionó con el hecho de que evidentemente existen las oficinas de prensa que hacen la comunicación formal de los temas del Mercosur, pero no generan procesos de integración. El problema está en que no se construyeron políticas de comunicación. Según Dos Santos, a pesar de dicha limitación, en los últimos años, se realizaron esfuerzos para crear espacios pero todavía debe avanzar la conciencia para que las autoridades brinden el respaldo y otorguen  un  lugar importante a la comunicación.

Apuntó que en materia de comunicación se debe superar el concepto economicista para plantear temas relacionados con la historia, la vida, las tribulaciones y esperanzas de la gente. En este sentido, señaló la importancia de integrar a los medios públicos, con sus diversidades, enfoques, con las miradas que tengan. Precisó que “quizá sea este el mejor tiempo para los medios públicos en América Latina, debido al apoyo político que existe hacia el funcionamiento de los mismos y las posibilidades que poseen para integrarse a la ciudadanía.

“Es más fácil construir un proyecto de comunicación desde la vida cotidiana de la gente, mientras en el otro canal, de un medio comercial, está poniendo por ejemplo, un programa de espectáculo como ‘Bailando por un sueño´.  Desde esta situación es más fácil plantear las diferencias en una comunicación”, analizó Dos Santos, al observar el comportamiento de los medios privados.

Dos Santos precisó que existe una verdadera necesidad de que los gobiernos comiencen a entender realmente la comunicación en relación con la ciudadanía. “La lentitud de los procesos de integración conspiran contra las aspiraciones de integración verdadera que buscan los pueblos”, recordó.

Diálogo intercultural y poder

Por su parte, Washington Uranga, del Instituto Latinoamericano de Comunicación para el Desarrollo, el planteamiento de la superación de las desigualdades debe pasar por  la “reafirmación de las identidades” basada en el principio de alteridad (el respeto al otro y otra). La idea es comprender que los otros y otras son esencialmente distintos y me enriquecen en sus diferencias. Tengo que asumir que la identidad del otro me enriquece en el diálogo”, aseguró.

La reafirmación de la identidad, según Uranga, implica un diálogo entre culturas. Uranga reconoce que esta propuesta no es fácil, ya que el diálogo de la identidad también puede generar conflictos. Por ello, se debe adoptar una visión que sustente un  trabajo en proceso para superar dicha dificultad. “La conflictividad social es parte esencial de nuestra vida. Se trata dentro de esta realidad, de respetar las miradas diversas y entrar en el diálogo”, reflexionó.

Uranga comentó que la apuesta por el diálogo ni implica llegar siempre a un consenso sino plantear la problemática e intercambiar ideas. “Tiene que ser un diálogo intercultural, donde las identidades se relacionen.  El proceso relacional es importante y ello tiene que ver con el poder. El espacio de comunicación es un hecho simbólico de lucha por el poder. No hay que pensar que el conflicto es malo”, destacó.

“Las grandes metas se construyen desde lo que cada uno puede hacer en su ámbito específico. Los grandes cambios se realizan desde las cosas pequeñas. Seamos capaces de soñar que queremos un mañana para saber qué tenemos que hacer hoy”, enfatizó Uranga.