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Medio Ambiente
Uso de plantas medicinales
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08/10/2013
Vendedor de remedios refrescantes.

Nuestro país se encuentra en la lista de los países de mayor consumo de plantas medicinales en el mundo. ¿Quién no las ha ingerido en el mate o tereré o en algún té para prevenir o curar enfermedades?.

El consumo de las hierbas medicinales en el país se da en todas las estaciones del año; según investigaciones realizadas, la población en general cuenta con algunos conocimientos básicos de las propiedades curativas de los “pohã ñana”, que son transmitidos de generación a generación.

Los antecedentes históricos rememoran que dichos conocimientos sobre estas plantas autóctonas provienen de los indios guaraníes, que fueron recopilados por los jesuitas y los naturalistas que se asentaron en el país, para estudiar las propiedades curativas de estas especies.

La venta de estas plantas curativas a escala interna ha crecido considerablemente en los últimos años en nuestro país, ya que el consumo cotidiano de estas hierbas medicinales, hoy en día, forman parte de la cultura paraguaya.

Su venta ha crecido considerablemente.

Sin embargo, Paraguay aún no cuenta con un organismo de control sobre la producción, venta y consumo de estas plantas medicinales, como sí lo tienen varios países de América Latina.

Con la finalidad de implementar una Política Nacional sobre el uso de estas plantas curativas y fitoterapéuticos, varias instituciones conformaron un grupo interinstitucional para elaborar el plan y política nacional, a fin de ser presentado e implementado por parte del Estado Paraguayo.

La Fitoterapia se puede definir como la ciencia dedicada al estudio de la utilización de los productos de origen vegetal con una finalidad terapéutica.

Con esta Política Nacional en Plantas medicinales y su uso fitoterapéutico se plantea una posibilidad de ahorro muy importante en la atención primaria de la salud, en lo que respecta a la utilización de medicamentos.

Elido Ghiglione.

“Hay una diferencia muy importante entre lo químico y entre el procesamiento de plantas medicinales en sus formas secas o extractos, ya que es mucho más accesible que la utilización de químicos que importamos”, explicó Elido Ghiglione, consultor del Proceso de Elaboración de la Política Nacional de Plantas Medicinales y Fitoterapéuticos.

Con la implementación de una Política Nacional en el país, la atención primaria de la salud, los hospitales, centros de salud, etc, tendrán la libertad de utilizar y recomendar las plantas curativas, evitando en gran medida, llegar a los químicos.

“No se trata de suplantar lo químico, sino más bien de buscar un complemento a una afección que por ahí podemos solucionar con una planta medicinal. Sabemos que el consumo de lo químico pueden llegar a tener otro efecto también negativo”, manfiestó Ghiglione.

Dar preferencia al uso de las plantas medicinales.

Varios países de América Latina, entre los que se mencionan Brasil, Bolivia, Argentina, etc, ya cuentan con una Política Nacional de Plantas Medicinales. Tomando el ejemplo del vecino país, Brasil, se puede observar que en los municipios y gobernaciones cuyos hospitales utilizan plantas medicinales como primer remedio, existe un importante ahorro económico, en comparación a la inversión en medicamentos químicos.

En la actualidad, los médicos paraguayos no cuentan con el respaldo correspondiente para recomendar el uso de plantas medicinales, ya que aún no está establecido su uso dentro del marco legal, en caso contrario, el médico puede ser acusado de mala praxis.

Impacto Social y Ambiental

La propuesta de estas instituciones hacia la implementación de una Política y Plan Nacional de Plantas Medicinales, generará un gran impacto social y ambiental para todo el país.

Brindará fuentes de trabajo a nivel de productores primarios.

 

Entre ellos, cabe resaltar el impacto económico puesto que brindará fuentes de trabajos, a nivel de productores primarios, huertas familiares, agricultura familiar, ya que es un punto muy importante de sustento para las familias paraguayas.

“Esto también implicaría salir de una cultura de extracción, a una cultura de cultivo de plantas medicinales. Hoy en día, gran parte de lo que consumimos se extrae y no se repone, entonces corremos el riesgo de que muchas especies puedan desaparecer”, señaló Ghiglione.

Garantías en el consumo

Centro Ambiental - vivero forestal de Itaipu.

Las plantas medicinales, como parte significativa del acervo cultural Nacional, constituyen un rubro importante del sector agrícola como generador de ingresos, debido a que en forma generalizada están siendo utilizadas por la población en mayor o menor grado, para la conservación de la salud y el tratamiento de enfermedades. Estos usos no se restringen al consumo en forma fresca o como derivados de un procesamiento primario, ya que se comercializan desecadas y envasadas y consumidas en infusiones y decocciones, o mezcladas con el agua para mate o tereré. Aunque las plantas medicinales y fitoterapéuticos son frecuentemente utilizadas por la población, para la prevención o tratamiento de diversas afecciones, las mismas no están incluidas como medicamentos en la medicina terapéutica.

En base a lo expuesto, el Plan Nacional pretende brindar garantías sobre el consumo de las plantas medicinales. “Hoy en día todos consumimos e incluso compramos del mercado productos envasados que vienen de afuera y que no nos dan garantías de lo que nos están vendiendo. Por lo tanto, queremos trabajar en esa área y sobre todo informar a la población de lo que se está consumiendo y de lo que se puede llegar a consumir. Otro énfasis que se está dando a todo ese proceso es que se pueda trabajar desde el Ministerio de Salud, sin descuidar las otras áreas, especialmente la de investigación y todo lo que tiene que ver con la conservación de la biodiversidad”, explicó Elido Ghiglione.

Política Nacional de Plantas Medicinales y Fitoterápicos

Varias instituciones del sector público y privado, lideradas por la Itaipu Binacional, conformaron el Consejo Asesor para la Política y Plan Nacional de Plantas Medicinales y Fitoterapéuticos, el cual tuvo a su cargo la elaboración del Borrador del documento de la Política Nacional, que busca solucionar todos los vacíos en el uso de las plantas medicinales, con la investigación, a fin de que la medicina lo pueda utilizar como medio.

La Política Nacional de Plantas Medicinales y Fitoterapéuticos, busca garantizar el acceso de la población a los recursos vegetales y sus derivados, con el objetivo de preservar y recuperar la salud mediante el uso sustentable, en un entorno de seguridad, eficacia y calidad.

Entre los parámetros del proyecto se pretende establecer los aspectos que permitan el uso de manera segura, eficaz y eficiente de las Plantas Medicinales y Fitoterapéuticos como alternativa terapéutica, en atención primaria de la salud, dando lugar a los conocimientos tradicionales y culturales.

El proyecto apunta además, a promover la formación de recursos humanos en la investigación y desarrollo de tecnologías conducentes a la utilización racional de las plantas medicinales y los fitoterapeúticos visualizando las cadenas productivas.

Cabe resaltar, que la propuesta de Política Nacional de Plantas Medicinales y Fitoterapéuticos busca crear un marco regulatorio para la recolección, producción, procesamiento, industrialización, distribución y comercialización, tanto interna como externa, de las Plantas Medicinales y Fitoterapéuticos, además de promover la preservación de los recursos fitogenéticos y los conocimientos tradicionales y autóctonos de los pueblos originarios en el uso de estas Plantas Medicinales.

Instituciones Involucradas

Entre las instituciones involucradas en la elaboración de la Política y Plan Nacional de Plantas Medicinales y Fitoterápicos se mencionan: el Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social; el Ministerio de Agricultura y Ganadería; la Secretaria del Ambiente; Servicio Nacional de Calidad y Sanidad Vegetal y de Semillas (SENAVE); Universidad Nacional de Asunción – Facultad de Ciencias Químicas; Organizaciones de Productores CAPAHITE, Sociedad Científica del Paraguay y la Itaipu Binacional.