En la noche del viernes se dio inicio a la ceremonia inaugural del XXI Cumbre Iberoamericana Jefes de Estado y de Gobierno, en el teatro “José Asunción Flores” del Banco Central del Paraguay (BCP).

El lema de esta cumbre propuesto por el presidente de la República, Fernando Lugo Méndez es “Transformación del Estado y Desarrollo”. El anfitrión y el Secretario General Iberoamericano, Enrique Iglesias, dieron la bienvenida a los presentes.

La XXI Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno se inició oficialmente en la noche del viernes en el teatro del BCP, con el lema “Transformación del Estado y Desarrollo”. El discurso inicial  estuvo a cargo del Secretario General de Iberoamérica, Enrique Iglesias.

Iglesias expresó que el Paraguay es una nación de historia, acosada por la adversidad y sin perder la esperanza. “El Paraguay es un país que no se acomodó ni a la injusticia ni a la opresión, celebra su bicentenario en libertad y democracia”, expresó.

Destacó que la cumbre coincide con momentos confusos y violentos de a economía mundial de los últimos 70 años y el aumento de tensiones en los llamados países desarrollados como así también el surgimiento en la escena de países emergentes y constituidos en la parte dinámica del crecimiento de la economía mundial y varios de ellos son naciones latinoamericanas.

Puntualizó que la Unión Europea está en pleno acuerdo para solucionar los problemas de Grecia y aprobación de leyes para estabilizar los mercados financieros y que los países emergentes están con un crecimiento significativo que va desde una tasa del 5 por ciento de promedio y hasta del 15 por ciento histórico como fue el caso de Paraguay.

Destacó que el crecimiento económico de Paraguay, como de los países latinoamericanos, se debió mediante índices de bajo desempleo, reducción de deuda externa y acumulación de reservas. “Esta es la gran oportunidad de América Latina y el crecimiento se debió a dos grandes factores: sólida conducción de políticas macroeconómicas y el buen comportamiento de mercados de materias primas estimulados por la vigorosa demanda asiática”, señaló.

Aseguró que el auge del crecimiento de América Latina no se frenará si se toman algunas condiciones externas como ser la estabilización de los mercados europeos y de los Estados Unidos, equilibrio en los países asiáticos.

“América Latina debe preocuparse por sus factores internos, lo primero de todo es controlar la política macroeconómica y un buen sistema educativo. Sin educación no se construye un país en justicia social; el otro desafío es la equidad, la innovación, modernización de instituciones públicas”, manifestó Iglesias.

Recomendó que Iberoamérica se debe reforzar mutuamente para enfrentar los vientos turbulentos que pueden llegar de los movimientos internacionales. “América Latina es un campo fértil para el desarrollo mundial”, concluyó

Recuperación de soberanía económica

El anfitrión de la Cumbre, el Presidente de la República, Fernando Lugo Méndez indicó que el encuentro se da en un momento histórico, la celebración del Bicentenario de la independencia, de soberanías y afirmación de identidades.

Criticó los modelos (económicos) impuestos e importados (recetas neoliberales de los noventa). "Están agotados, y sus resultados han sido perversos, permitiendo la fuga de capitales, el desempleo masivo, creación de una clase social privilegiada, inseguridad social y la marginación”, sostuvo.

El Primer Mandatario apuntó que la política económica de los Estados no debe ser la búsqueda de equilibrios macroeconómicos por encima del acceso a la salud, educación, entre otros factores.

“Nuestros gobiernos han aprendido esta lección histórica y nuestros pueblos decidieron democráticamente la necesidad de reconstruir los Estados bajo nuevos paradigmas. En este proceso de integración regional, nuestros gobiernos tienen vocación social con planes y proyectos que modifican las estructuras a favor de los más necesitados”, aseveró.

Agregó que los países de la región buscan recuperar la soberanía económica y que no es aceptable que un país emergente permanezca en la periferia de otros que se incorporan al mundo desarrollado. “Es inaceptable que un grupo de Estados decidan sin consulta alguna y sin debates democráticos la suerte de millones de seres humanos; la solidaridad no debe estar sólo en discursos, es hora que las declaraciones se transformen en hechos concretos” Finalmente expresó que los resultados de la Cumbre redunden en beneficio de todos los países.

De la cumbre participan el presidente de España, José Luis Rodríguez Zapatero, el presidente de México, Felipe Calderón, el presidente de Portugal, Aníbal Cavaco Silva y primera dama, el presidente de Ecuador, Rafael Correa, Peru, Ollanta Humala, de Honduras, Porfirio Lobos, el presidente de Bolivia, Evo Morales, el presidente de anamá, Ricardo Martinelli. También están presentes, el vicepresidente de Costa Rica, Alfio Piva y la vicepresidenta de Honduras, María Antonieta Guillén, el rey de España, Juan Carlos I y la reina, Sofía.