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Medio Ambiente
“Pepita”, adaptada a su nuevo hogar: el zoo
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09/05/2013

 

Pepita ya está totalmente domesticada. En esta gráfica se la observa jugueteando con la bióloga María Luisa Ortíz.

A seis meses de su llegada al Zoológico de Itaipú, Pepita ya se encuentra totalmente adaptada a su nuevo hogar, el zoológico de Itaipu, margen derecha. Se trata de un ejemplar de Nutria, lobito de río, o lobope (Lontra longicaudis). Cuando llegó al zoológico, pesaba 1,800 kg y contaba con aproximadamente 3 meses de edad.

“Es una hembra que cariñosamente llamamos pepita. Se realizó la ambientación correspondiente para la especie, disponiendo refugios en el recinto con troncos y piedras. Por ser una especie semiacuática, se utilizó un producto especial antitóxico inocuo para su salud, para pintar su pileta”, explicó al DIE la bióloga, María Luisa Ortíz.

La profesional añadió que la alimentación de Pepita consiste esencialmente en carne de pollo y codorniz, y en algunas ocasiones carne vacuna.

Entre las características morfológicas de la especie se menciona que tiene la parte dorsal totalmente marrón oscuro brilloso, pelo corto y denso, garganta y vientre de coloración blancuzco a amarillento o marrón. La cabeza pequeña, chata, el cuello más ancho que la cabeza, los ojos pequeños, las orejas cortas y redondeadas. La cola larga, ancha en la base y afinándose hacia la punta. Las patas cortas y pies con membrana interdigital.

Esta especie es excelente nadadora. Su mejor desplazamiento se da precisamente en el agua.

Es una especie que, pese a estar ampliamente distribuida desde el norte de México al sur de Uruguay, es muy raras veces vista.

En hábitat natural, esta especie es de vida diurna y nocturna, semiacuática, solitaria o madre con crías. Se alimenta principalmente de peces y crustáceos, suplementado por otros animales acuáticos. “Esta especie está siempre en o cerca del agua y es un buen nadador y buceador. En tierra se desplaza con un galope encorvado o camina meneándose”, describió la bióloga Ortíz.