Foto: 

ENERPY NOTA 1 TAPITA.JPG [1]

Como parte de la campaña de prevención contra el dengue, chikungunya y zika, impulsada por el Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social (MSPyBS), la ITAIPU Binacional ha contratado y ejecutado el servicio de disposición final de 51.500 neumáticos fuera de uso, los cuales se convierten en potenciales criaderos del Aedes aegypti, el mosquito transmisor de las enfermedades citadas.

La disposición final de los neumáticos fuera de uso fue realizada en dos etapas; la primera, de 12.000 unidades, durante el 2016, las cuales representan la disposición final del acumulado de neumáticos adquiridos por la ITAIPU. Mediante esta acción la Entidad cumple con los compromisos de sostenibilidad y cuidado ambiental, haciéndose responsable por los neumáticos utilizados para su flota de vehículos.

La segunda etapa, realizada durante el año 2017, consistió en la disposición final de 39.500 neumáticos acumulados en un depósito del Servicio Nacional de Erradicación del Paludismo (SENEPA), ubicado en Ciudad del Este, el cual representaba un serio problema para los pobladores de la zona, por ser un potencial criadero del moquito transmisor. La disposición final de esta segunda etapa fue realizada de manera coordinada con el SENEPA, zona operativa 10 - Alto Paraná.

Recientemente, se concretó una reunión de trabajo en las oficinas de ITAIPU, donde se habló sobre las posibilidades de una tercera etapa, a ser implementada este año (2018) con el apoyo de la Entidad, tomando de referencia la campaña de prevención que actualmente está intensificando el Ministerio de Salud Pública, a través del SENEPA, como así también el pedido de apoyo de otras instituciones que se suman a esta iniciativa.

Sistema de procesamiento

Los servicios de disposición final de neumáticos fue ejecutada por la firma ENERPY Ambiental S.A., mediante una planta procesadora de residuos peligrosos, la cual cuenta con licencia ambiental y se encuentra en condiciones de eliminar materiales contaminantes del medio ambiente.

Dicha tecnología, en caso de residuos orgánicos los transforma en variados productos combustibles, que son aprovechados para el autoconsumo energético del proceso.

El trabajo realizado por la planta procesadora de residuos permite e induce a una reestructuración de los mismos átomos de dichas moléculas o cadenas cortas en los que se han convertido, expulsando así, a través de un proceso catalítico, una serie de nuevas sustancias simples y compuestas, que corresponden a la familia de los hidrocarburos. Y en caso de procesar residuos inorgánicos, como metales, vidrio y otros, los mismos quedan inocuos y/o esterilizados.

El emprendimiento, por sus características básicas, posibilita la creación de un sistema de manejo de residuos urbanos e industriales y, como consecuencia, la aplicación de la normativa ambiental vigente. Por lo tanto, el sistema contribuye para una solución ambientalmente adecuada al tratamiento y disposición final de residuos.