Este lunes, 24 de febrero, se conmemora Día de la Mujer Paraguaya e ITAIPU Binacional se une a la evocación destacando el valioso aporte de trabajadoras que participan en la construcción de 100 viviendas sociales en Pilar, Ñeembucú. Sin duda, sus historias son testimonio del mismo espíritu de fortaleza que caracterizó a las "reconstructoras" y "residentas" de 1867, quienes ofrendaron sus joyas y pertenencias para solventar gastos de la Guerra de la Triple Alianza.
Entre estas abnegadas trabajadoras se encuentra Rosa Martínez, quien desafía los estereotipos con su experiencia y habilidad. "Podemos decir que somos mejores que ellos", afirmó en son de broma, aunque reconoce que el camino no ha sido fácil. "Hay mucha gente que no quiere a mujeres trabajando en obras así", señaló. Lanzó un desafío a los contratistas escépticos e instó a "que se animen, que les podemos sorprender muy grande".
Por su parte, Laura Morínigo encarna la perseverancia y adaptabilidad. "Al principio estuve lenta, pero ya me adapté al ritmo de trabajo", compartió sobre sus inicios en la construcción. En la actualidad, su trabajo es eficiente y con su salario ayuda en el sustento familiar.
De manera similar, Fabiola Vázquez ejemplificó la versatilidad de la mujer paraguaya en la construcción. Especializada en albañilería y plomería, destacó especialmente la importancia del trabajo en equipo. "Me siento cómoda trabajando con mis compañeros, ellos nos ayudan para hacer las tareas de la construcción", apuntó. Remarcó que la colaboración supera cualquier tipo de barreras.
Mientras tanto, Nilda Pérez, quien trabaja junto a su pareja en tareas de albañilería, plomería y electricidad, representa un verdadero testimonio de cómo el trabajo dignifica. "No hay que tener miedo al trabajo, a lo único que debemos tener miedo es a robar. Después solo queda luchar, si Dios te dio salud", aconsejó. Además, su mayor orgullo es haber educado a tres hijos profesionales: un licenciado en administración, una contadora pública y otro en proceso de formación.
Este proyecto de ITAIPU, a la par de que proporcionará viviendas dignas a familias necesitadas, también está generando oportunidades laborales para mujeres en el sector de la construcción.
Estas cuatro historias de esfuerzo y superación constituyen un homenaje contemporáneo a las mujeres que participaron en la Primera Asamblea de Mujeres Americanas, hace 158 años, y reflejan cómo el espíritu de sacrificio y trabajo por el progreso del Paraguay sigue vigente en cada una de ellas.
Exibir na página inicial: