La ITAIPU Binacional se suma a la conmemoración del Día Mundial de los Humedales (2 de febrero), cuyo lema este año es “Acción en favor de los humedales para las personas y la naturaleza”, destacando así la importancia de lograr que los humedales se conserven y se utilicen de forma sostenible y racional. Las ocho áreas protegidas de ITAIPU Binacional conservan varios ecosistemas acuáticos y terrestres, entre ellos los humedales.
La Binacional brinda especial atención al cuidado del medio ambiente y la biodiversidad. En este sentido, hay que destacar los estudios de la vegetación de los humedales, realizados por la División de Áreas Protegidas de la Entidad, que enfatizan la importancia de conservar los diferentes tipos de estos ecosistemas presentes en las reservas naturales.
La protección, manejo e investigación realizadas en los humedales de las áreas protegidas de ITAIPU, en el marco del “Programa 239: Biodiversidad Nuestro Patrimonio”, no solo contribuyen a la conservación de la biodiversidad, sino a la estable provisión de la materia prima para la producción de energía limpia que impulsa el desarrollo del país: el agua.
Los humedales son áreas terrestres que permanecen saturadas o inundadas de agua durante considerables períodos de tiempo, provocando que los suelos posean rasgos particulares y que las distintas formas de vida que habitan en ellos, especialmente las plantas arraigadas, presenten adaptaciones para tolerar la inundación o la alternancia de períodos de inundación y sequía.
Estos cubren un pequeño porcentaje de la superficie terrestre, pero han desempeñado un papel fundamental para el desarrollo de la vida sobre la tierra, incluyendo la supervivencia de las comunidades humanas a lo largo de la historia. Estos ecosistemas actúan como fuente de agua dulce y albergan una excepcional biodiversidad. Asimismo, brindan importantes beneficios, tales como la depuración de las aguas, la mitigación de las inundaciones, entre otros.
En la actualidad, se hallan seriamente amenazados a nivel mundial, incluyendo a Paraguay. El desarrollo de la infraestructura, el cambio de uso de la tierra, la deforestación, la contaminación y la introducción de especies exóticas son algunas de las causas del deterioro de estos ecosistemas. La conservación de los humedales, uno de los ecosistemas del que más depende el agua, es fundamental para hacer frente a la crisis de agua dulce que amenaza hoy día a la población mundial.