En el marco de las acciones encaminadas por la Superintendencia de Gestión Ambiental para fortalecer el territorio de la Reserva de Biósfera ITAIPU (RBI), que comprende los departamentos de Alto Paraná y Canindeyú, se llevaron a cabo una serie de capacitaciones en las comunidades durante el 2022, siendo beneficiados los productores y los docentes, principalmente.
Entre las actividades del programa de formación se destacan los talleres sobre buenas prácticas agropecuarias que tuvieron como participantes a los productores locales, en el marco del proyecto Yvyrandu. Este emprendimiento tuvo el fin de brindar asistencia directa a los agricultores para que instauren la producción sostenible en sus fincas, con el apoyo de los municipios locales.
Asimismo, durante los talleres se les orientó sobre la importancia de tener el aspecto laboral en regla, lo que significa cumplir contratos con el personal y proporcionar condiciones dignas de trabajo. Ciudadanos de varias comunidades de los dos departamentos afectados recibieron la instrucción por medio de los especialistas.
También se dio especial énfasis a la educación y concientización sobre la importancia de preservar el territorio. Al respecto, se llevó adelante el curso de formación de promotores ambientales en instituciones educativas regionales, dependientes del Ministerio de Educación y Ciencias (MEC). En total, fueron capacitados 52 docentes en dos cursos presenciales, los cuales incluyeron los módulos Ecología y Medio Ambiente; Ecología y Sociedad; Impacto Ambiental; Elaboración de Proyectos; y Educación Ambiental como Herramienta de Cambio.
Estas capacitaciones pretenden que los profesores se conviertan en agentes activos y multiplicadores de protección ambiental, para que así transmitan sus conocimientos a los alumnos y pobladores de sus respectivas ciudades.
Asimismo, en julio del año pasado se desarrolló el curso “Introducción a la Reserva de Biósfera ITAIPU (RBI)” en forma virtual para la ciudadanía en general y 30 participantes lo finalizaron. Contempló los módulos Desafíos de la Reserva de Biósfera; las Reservas de la Biósfera como oportunidad; Reserva de la Biósfera ITAIPU; y Reserva de Biósfera en Acción.
En lo que se refiere a las tareas de investigación, se avanzó en la construcción de los indicadores que presenta el vasto territorio de la RBI. Los mismos están categorizados en hidrología (disponibilidad de agua), morfológica (sedimentos), calidad de agua (estado ecológico), conectividad (bosques protegidos de cursos hídricos y conectividad biológica terrestre), entre otros aspectos.
Con estas informaciones se podrá tener perspectivas más puntuales acerca de las condiciones que se presentan en los diversos municipios y así servirán de insumo clave para tomar decisiones sobre las futuras acciones. Se prevé que estos datos estén disponibles en un portal web para consulta de los interesados.
La RBI abarca 16 municipios de Alto Paraná y Canindeyú; posee una superficie de 1.047.438 hectáreas; y en ella viven alrededor de 250.000 habitantes.