Resaltan buenas prácticas de ITAIPU en evento de la CAF sobre Biodiverciudades

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La Corporación Andina de Fomento (CAF) Banco de Desarrollo de América Latina organizó un evento denominado “Hacia las Biodiverciudades” que se llevó a cabo el jueves 6 de octubre y tuvo como una de las panelistas invitadas a la Dra. María Antonia Gwynn, miembro del Consejo de Administración de la ITAIPU Binacional, quien participó del conversatorio sobre “Gestión de Recursos Hídricos para un desarrollo urbano sostenible”.

Una biodiverciudad es aquella ciudad que incorpora de forma efectiva e integral la biodiversidad local y regional en su planificación y gestión urbana como eje de su desarrollo socioeconómico.

En la apertura del encuentro, habló el ministro de Hacienda Oscar Llamosas, quien además es presidente del Directorio de la CAF. En ese sentido, destacó el apoyo de este organismo multilateral que reúne a 21 países. Asimismo, expresó que una de las características de nuestro país, así como el de toda la región, es su gran biodiversidad. Apuntó que el desarrollo urbano es un gran desafío para las ciudades de América Latina, asegurando el desarrollo sostenible.

La introducción del panel principal estuvo a cargo de Jorge Srur, gerente regional Sur de la CAF, quien reflexionó sobre la importancia del agua y puntualizó que se convirtió en una gran aliada para el desarrollo del país y al mismo tiempo en su riesgo más temible.

“Vemos la abundancia de la energía hidroeléctrica que brinda la oportunidad de ser un gran imán para las inversiones, o sus tierras húmedas que le permiten producir alimentos de máxima calidad de reconocimiento internacional, pero; a la vez, vemos cómo sequias e inundaciones, falta de drenajes o mal tratamiento de aguas residuales, se han convertido en una gran amenaza para la salud, el empleo y la mejor productividad del país”, remarcó. Refirió que el problema no es el agua, sino lo que hacemos o dejamos de hacer con ella.

Protección del agua

Por su parte, la Dra. María Antonia Gwynn, durante su presentación refirió que el agua es un recurso vital y está declarado en resoluciones de la Asamblea General de Naciones Unidas que la protección de estos recursos es una tarea de toda la humanidad. “Esta tarea tan importante la debemos realizar a través de la gestión de los recursos hídricos para el desarrollo sostenible”, insistió.

Señaló que en todo el continente se está atravesando por una de las crisis hidrológicas más importantes registradas en la historia. “En cuanto al río Paraná, un río internacional, los datos demuestran que, en los últimos años, la afluencia promedio del agua va decreciendo. Esto, para una central hidroeléctrica que depende exclusivamente de la materia prima agua para la producción energética, tiene sin dudas un impacto sustancial”, enfatizó.

No obstante, comentó que, para la generación energética, operacionalmente se aprovecha cada gota de agua de la manera más eficiente posible, y ello está reflejado en los índices de productividad de ITAIPU, que van aumentando a pesar de la poca afluencia. Igualmente, la consejera hizo notar la innegable interdependencia existente entre los recursos hídricos y los ecosistemas terrestres.

Acciones de ITAIPU

En ese sentido, la Dra. Gwynn compartió algunas acciones realizadas por ITAIPU para garantizar la seguridad hídrica, así como la protección y restauración de bosques. Igualmente, mencionó los monitoreos de las variabilidades climáticas a través de las estaciones meteorológicas, así como los trabajos de recuperación de manantiales y tributarios y el apoyo de la tecnología para el control de sedimentos con aparatos como el multi-beam.

También habló de las acciones ambientales, sobre todo en la parte de reforestación y restauración de los bosques con plantas nativas, lo que ayuda a la restauración del Bosque Atlántico del Alto Paraná. “La generación de energía va de la mano de la seguridad hídrica y las acciones ambientales para el efecto ayudan, a su vez, a la protección de la biodiversidad”, resaltó la consejera Gwynn.

De igual manera, refirió que en estas tareas son fundamentales los colaboradores claves. “Esto tiene que ser un trabajo conjunto entre municipios, comunidades, sociedad civil, el Estado, organizaciones no gubernamentales y pueblos indígenas”, añadió.

Sobre los desafíos, la consejera recalcó que cuanto más escaso sea el recurso natural, más difícil será satisfacer las necesidades que derivan de ese recurso. Explicó algunos principios de derecho internacional y culminó señalando un ejemplo positivo que demuestra que se puede lograr un equilibrio entre diversos usos múltiples de un recurso hídrico, siempre que medie el trabajo conjunto y la cooperación, tal como sucedió con la operación especial Ventanas de Agua.

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